9 de Agosto del 2013POR GUADALUPE SÁNCHEZ
Platicamos con el actor, quien nos confesó que ya abandonó esta terrible adicción.
El actor decidió dejar el cigarro por salud, y aseguró que se siente mucho mejor.
De buen humor y con esa sencillez que lo caracteriza, César Evora, de 53 años, se encuentra en una de sus mejores etapas, tanto en lo profesional como en lo personal. El cubano, quien tiene 22 años casado con Vivian y disfruta de sus 3 hijos: Karla, de 19; Rafael, de 27, y Marina, de 25 (los 2 últimos de su primer matrimonio), nos contó que está muy contento, ya que hace 2 años dejó de fumar luego de hacerlo durante 3 décadas. Esto fue lo que nos dijo:
-César, te vemos muy contento...
“Me divierto con las villanías de ‘Fulgencio’ en la novela (La tempestad), además de que me encanta venir a grabar aquí (Veracruz) porque la gente quiere mucho al personaje, o no sé si a mí (ríe), porque me tratan como si fuera su primo, amigo o hermano. El pueblo de Alvarado parece sucursal de La Habana (Cuba) y me siento como en casa”.
-Nos dijeron que después de muchos años, por fin dejó el cigarro...
“Sí, hace 2 años, y me siento más joven; me sentó de maravilla. Mi mujer y mis hijos fueron quienes se alegraron más de este logro”.
-¿Cuántos cigarros fumaba al día?
“Una cajetilla y media, y a veces llegué a las 2 completas (40 cigarros). Tenía el vicio muy fuerte. Fumé más de 30 años, hasta que logré dejarlo. Lo peor era el olor del tabaco, me lo llevaba a todas partes sin darme cuenta. Cuando fumas no estás consciente de que todo el tiempo hueles a cigarro: la ropa, la boca, y eso a tus seres queridos no les gusta”.
-¿A qué método recurrió?
“No usé cigarrillo electrónico, ni terapias, pastillas o hipnosis, nada, y me ahorré mucho dinero. Dejé de fumar con fuerza de voluntad, sólo dije: ‘no fumaré más’, ¡y se acabó!”.
-¿Tuvo alguna reacción?
“Mi salud mejoró notablemente. Sólo subí un poco de peso, pero no importa, uno es actor. No me duele nada, cada año me hago mis chequeos médicos y he salido bien”.
-¿Qué le recomienda a los que quieren dejarlo?
“Tomar conciencia de que daña los pulmones, la piel, el sentido del gusto, y en general a todo el cuerpo, porque causa muchas enfermedades y ansiedad. También aconsejaría que si no están 100 % convencidos, no gasten tanto dinero, hasta que tengan la firme voluntad de dejarlo”.
-¿Ahora cómo se siente?
“Muy bien; mejoró mi paladar y mi olfato, ahora sí huelo y disfruto la comida, ¡ya me saben los platillos de mi tierra!”.
-¿De verdad ya no fuma nada?
“Muy de vez en cuando disfruto de un puro cubano, porque aún me gusta el olor del tabaco”, finalizó.
DRC
